Querida gente linda, México tiene los elementos necesarios y
sobrados para ser no solo un Estado de primer mundo, sino para ser
potencia económica y social. Los recursos naturales con los que cuenta
este país, la riqueza cultural, su historia, su Constitución Política
garantista, la calidez y capacidad de su gente son muestra de que tenemos
todo. ¿Cuál es entonces el problema? En mi muy humilde y personalísima
opinión, entre otros llegué a la conclusión de que tenemos una
mentalidad colectiva atrapada en la mediocridad, la pobreza intelectual,
el paradigma de sometimiento de pueblos “superiores” sobre nosotros por haber sido
históricamente “conquistados”, aunque parece que seguimos siendo
conquistados todos los días cada vez que le damos el poder a las
circunstancias que nos mueven a placer, en lugar de levantarnos sobre
nuestra voluntad y tomar control de las circunstancias; y no hablo de
manera particular, pues he visto la lucha de gente valiosísima por
salir adelante y lograrlo; hablo del comportamiento colectivo de nuestro
pueblo.
Un ejemplo es la constante crítica a quien
represente autoridad en todos los ámbitos, quien sea que lideré un grupo,
una familia, una empresa, un gobierno o un sencillo equipo de trabajo,
tendemos a cargar sobre esa figura de autoridad la responsabilidad de no
haber hecho NOSOTROS el esfuerzo extra que nos separa del fracaso. Otro
ejemplo es la mentalidad de gran parte de nuestra gente al creer que no
puede aspirar a una mejor calidad de vida, reclamar su derecho al acceso
de servicios con mayor calidad, sea una vivienda, un trabajo en mejores
condiciones, servicios de salud, entretenimiento, medios de transporte; y
me cuestiono ¿Quién nos ha dicho que no podemos? Esta barrera mental
que hemos creado alrededor del MIEDO AL CAMBIO. El ser humano por
naturaleza rechaza y juzga lo que desconoce, así que al vernos en un
ambiente ajeno al que conocemos lo destruiremos consciente o
inconscientemente: un muro recién pintado, lo rayarán quienes no tienen
conciencia de la contaminación visual, un lugar público será objeto de
vandalismo o descuido por los usuarios que comparten ese espacio, cumplir
con nuestras obligaciones cívicas y fiscales será siempre motivo de
molestia y se traducirá en el servicio deficiente que recibimos como
ciudadanos. ¿Será una reacción ante el miedo de ubicarnos en un ambiente
mejor al que conocemos? ¿acaso perdemos identidad si salimos
del conformismo y aspiramos al progreso? Si lográramos superar esta
parte, seguroque elegiríamos para nuestras vidas solo lo sabio, lo
prudente, lo adecuado.
México es sinónimo de
grandeza, no te distraigasen la corrupción, en la denigrante forma que
algunos medios te ofrecen para entretener, en la pobre necedad de quien
insiste en la ignorancia; tú atrévetea ser auténtico, sal del espejismo
del “no puedo”, corrigiendo la actitud derrotista, fortaleciendo tus
virtudes, conquistando tu carácter, compartiendo tus talentos.
Solo hace falta que lo decidas, hoy es un buen díapara hacerlo.. ¿no crees?