sábado, 18 de diciembre de 2021

Somos Peregrinos, la única constante es el cambio.

No hay duda, somos peregrinos en la vida. No hay una certeza de permanecer en un lugar, bajo las mismas condiciones, rodeado de las mismas personas o haciendo lo mismo cada día. Todo ha sido y seguirá siendo temporal. Si vemos al pasado, habremos de notar como hemos avanzado. No solo la edad nos moldea y conforma al presente, también las convicciones, la idiosincracia, valores y lo que vayamos acumulando en el corazón. La única constante en la vida es el inevitable cambio.

¿Qué tan abiertos estamos al cambio? ¿qué tan preparados nos encontramos? ¿cómo lo recibimos sabiendo que es imposible evitarlo? Es natural sentirnos amenazados ante lo desconocido y por naturaleza e instinto de conservación lo rechazaremos. Sin embargo, dominar los temores es todo un arte y se basa en la habilidad de aprender a dimensionar la situación, porque esto nos da una perspectiva real del temor al que nos enfrentamos. 

Una vez identificado nuestro reto a vencer, haremos uso de cuanto recurso hayamos ido cultivando en la vida. Conocimiento, experiencia, fé, inteligencia emocional, paciencia, fuerza, consistencia, integridad. Herramientas poderosas al alcance de nuestra voluntad. Por eso es fundamental para quienes asumimos la vida cristiana, que saturemos nuestra mente y corazón con las palabras del Señor, pues es Su Palabra la que nos sostiene y alumbra en medio de la prueba.

Los cambios siempre son buenos, sí, siempre. ¿Cómo puedo estar tan segura? te diré mi secreto: "Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas obran para bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados." Romanos 8:28

viernes, 17 de diciembre de 2021

Amabilidad. Lo que hace del ser humano, más humano.


Ser amable con quienes nos aman es tarea sencilla y agradable. Ofrecer una amplia sonrisa a quienes nos aceptan, es reconfortante. Pero ¿qué hay de amar a quienes nos rechazan? No vayamos tan lejos, al menos soportar a ese alguien tan insoportable.

Pues te diré que soportar no es suficiente y es tan ruin como odiar, porque se soporta una carga impuesta, involuntaria a la que desearíamos no existiera.

A esos que ante quienes nos descubrimos intolerantes, convirtámoslos en la fuente de nuestro crecimiento humano. Fuente de Santidad. Fuente de motivos para construir y no para destruir. Sean ellos la oportunidad para desarrollar en nosotros la paciencia, empatía, silencio interior y de manera natural vendrá el perdón, seguido casi de inmediato del amor.

A quienes no queremos, terminaremos perdonando y amando porque no hay orgullo testarudo que resista el afecto. Ofrezcamos un saludo cordial que destruya la barrera de la indiferencia antes incluso de ser construida.

No reacciones ante el trato de los demás, porque serás títere de la voluntad ajena. Serás agradable con quien te trate bien, y no tan amigable con quien no te demuestre cariño. ¿Lo ves? tus actos serán la respuesta dependiente de lo que otros decidan por tí y habrás perdido no solo la libertad de ser auténtico, sino la gracia de ser quien estás llamado a ser, un hombre pleno y feliz. Felicidad que solo proviene de vivir en perfecta paz.

Sé tú quien inicie el diálogo fraterno con una mirada a los ojos hacia ese alguien a quien evitas, y con esto le estarás diciendo que en tu mundo ella o él existe, es importante y valioso. Y si esto no fuera suficiente para acariciar su corazón, deberás vestir la mejor de tus sornisas, cálida, sincera, frágil y tierna. No sabrás lo que despertarás en la mente de aquel individuo, pero te diré que sucederá en tí. Comenzarás por descubrir sensaciones que no habías experimentado antes, una dulce y refrescante satisfacción llenará tu espacio, sabrás que eres tú dueño del momento y no la víctima de la mala actitud ajena. Apreciarás la fortaleza de tu voluntad al haber vencido lo que parecía inevitable ofrecer, menosprecio. Y un fuerte deseo de repetir la hazaña invadirá tu horizonte, haciendo de la amabilidad un hábito personal que te haga ser más humano. Y por ende, un hombre en paz y feliz.

"Por último, hermanos, piensen en todo lo que es verdadero, todo lo que es respetable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es digno de admiración; piensen en todo lo que se reconoce como virtud o que merezca elogio." Filipenses 4:8

domingo, 22 de agosto de 2021

Cirujía Mini-Bypass, mi experiencia.

 
Bendito Juéves 5 de Agosto, 2021. Ese día marca el fin de los miedos y el principio de la esperanza para mí. 10:00 am, Tijuana, B.C. México, en las manos del Dr. Jaime Ponce de León y la Dra. Claudia Chávez, magníficos médicos y excelentes personas quienes hicieron de este proceso llevadero, amable e informado. 


Obviamente con el acceso a tanta información en las redes, hay infinidad de testimonios, blogs, recursos que logran casi desinformarnos si no cuidamos las fuentes de nuestra búsqueda. Así que como mi naturaleza es curiosa y 'cuasi' desconfiada, llegar hasta aquí ha sido árduo trabajo de investigación, primero revisar los tipos de cirujías disponibles, conocer los beneficios pero también las consecuencias y posibles complicaciones. Una vez tomada la decisión, la pregunta más importante: Qué cirujano o Programa elegir. Esta parte no fué tan complicada porque aunque hay otros lugares que ofrecen estos procedimientos en Tijuana, algunos hasta les dan un tour por la ciudad después de la cirujía, pero escuché hablar del Dr. Ponce de León por primera vez a traves de un amigo en quien confío ampliamente por su capacidad de análisis y excelente sentido común, entre otras cualidades, y a quien con cariño le llamo 'El Jefe'. 

Debo abrir un paréntesis para exhortarles a que en su vida se rodeen de personas confiables, íntegras, honestas, que inspiren en ustedes las ganas de ser mejores, de aprender y superarse. De igual forma, sean ustedes esas personas para quienes tengan cerca, una fuente de inspiración, ayuda y paz; cierro paréntesis. 

Por motivos fuera de mi control y en plena pandemia sucediendo, el proceso de la cirujía tuvo que esperar un año, pero tal como en otras etapas de mi vida, nunca he quitado el dedo del renglón. Una vez más, mi paciencia fué puesta a prueba, esperar al tiempo propicio no siempre es sencillo, pero siempre ha sido la mejor decisión. 

Bien, pues comencé al fin con la dieta pre-operatoria, he de confesar que esta parte ha sido la más pesada, incómoda y fuerte de sobrevivir, y solo se me impuso por 7 días, pero entiéndanme, he comido con singular alegría todos los dias de mi vida, mi apetito jamás se ha visto comprometido ni cuando tengo gripa. La dieta pre-operatoria fue solo proteinas por 5 dias y 2 de solo liquidos y yogurt.  Sin embargo y para mi sorpresa, aprendí que el hambre y el antojo eran cosas diferentes, seguro tú lo sabes, pero en el mundo de una persona obesa no siempre se distingue la diferencia. En fin, al cuarto día de la dieta ya me había acostumbrado, no deliraba por comer algo más aunque disfruté enórmemente los dos dias de yogurt. Y como recompensa, solo esa semana ya había bajado 7 libras, aquí las cosas se empiezan a poner interesantes.

Debo confesar que me ví tentada a cancelar la cirujía y seguir solo dieta porque ví que bajaba de peso, pero desafortunadamente los niveles de azúcar en mi sangre seguian mas alto de lo normal, entre 240 y 260 (eso es mucho, si no mal entiendo lo normal debe ser alrededor de 90).  Luego recordé que todo el propósito de la cirujía era eliminar las medicinas que he tomado ya por poco mas de un año y de ser posible detener y hasta dar reversa a la diabetes si es que eso es posible.

DIA DE LA CIRUJIA


Llegamos a Tijuana, nos hospedamos en un hotel muy cerquita del hospital y al día siguiente tempranito me realizaron los análisis pre-operatorios y todo salió bien, estaba yo lista para el quirófano. No entraré en detalles aunque valdría la pena porque para haber sido primeriza en esto de cirujías, creo que tengo más de una anécdota que compartir. 

Recuerdo haber despertado en la sala de recuperación y pregunté: "¿apenas voy o ya me traen?", realmente no sentía nada. 

Lo resumiré en pocas palabras, desde ese momento, hasta que me dieron de alta 48 horas después, no tuve ningún tipo de dolor o molestia. Como dije, después de haber escuchado la experiencia de otras personas, todas coincidían en el malestar del gas que les oprimía el pecho, las néuceas, la casi intolerancia del agua y mucho menos de alimentos. Pues no, para mi suerte y bendición nada de eso lo padecí.

Y dos días después, estaba ya camino a casa pensando que había sido un sueño largamente acariciado, y que había comenzado una jornada inagotable de esperanzas, con la diferencia que esta vez eran 'al fin' alcanzables. Lo mejor está por venir, siempre.

jueves, 29 de julio de 2021

Una Cirugia Bariatica Diferente




Cuando lo decible se ha dicho en silencio, ya no hay miedo, solo la esperanza de lo que se espera. Saulo de Tarso diría: solo tengo fé. 

He vivido 45 años y precisamente hoy comienza una jornada que no planeé, una nueva forma de vida y no habrá marcha atrás. Hoy comienzo mi dieta pre-operatoria de cirugia bariatrica.

Para nadie es secreto mi sobrepeso, mejor dicho mi obesidad. Lo que sí es secreto es la intensa lucha por vencer la 'figura' que me he permitido, la he hecho parta de mi identidad. Por muchísimos años me rechacé a mimisma, distraje mi inconformidad con la parte que sí me gusta de ser quien soy. Alguien me dijo una vez que yo no era atractiva físicamente, pero obligaba a las personas a que pusiera su atención en mí por lo que hago, o como lo hago. No sé si estuve de acuerdo entonces, pero tampoco encontré argumentos para negarlo.

El drama de la obesidad es bien conocido y relatado en tantos medios, no tengo que agregar ni una coma a lo dicho, solo diré que no hay palabra que describa con justicia la constante agonía desde los ojos de una persona como yo, gorda.

Cuando aprendí a aceptarme, pude ver que efectivamente yo era más que una figura o desfigura. Tuve que aprender con varias lágrimas, que el valor humano no se mide en tallas, sino hechos, y aunque siempre lo supe, era difícil creerlo cuando al caer la tarde solo el anhelo de ser diferente y la soledad se quedaban conmigo.

Años han pasado desde entonces, un matrimonio feliz y la despedida de mamá han dirigido mis pasos hasta aquí. He visto lo que la obesidad, diabetes y disfunción renal pueden hacer en una persona con el paso del tiempo. No pude hacer mucho por mi madre, pero estoy segura que ella volvería a dar su vida por verme sana y feiliz. Este es mi motivo.

Asi que hoy, Juéves 29 de Julio de 2021 inicio la dieta pre-operatora, proteinas y líquidos. Esta lucha contra la diabetes la voy a ganar, no en mis fuerzas que son tan pobres; pero en Cristo que me fortalece. En la memoria de mamá y en el amor de mi esposo maravilloso que sostiene mi mano y mi alma.

Esta jornada la vivo no solo mecánicamente, sino emocionalmente y a conciencia. Mucho se ha documentado del proceso, pero poco se habla del cambio mental y hasta espiritual de esta metamorfosis física. Sí, quiero ser sana, perder peso será la consecuencia y recompensa de la decisión que comienza hoy.

Quédate conmigo Señor.

Inicio de Pista #

Foto 1